11 de noviembre de 2008

Compras para la biblioteca


Hoy viernes, tras la eucaristia a las 5.30 de la mañana he estado haciendo cosas en el ordenador: plantillas para solicitar subvención y para la memoria.... en todos los sitios que he conocido hay gente que por medio de religioso o ellos mismos se han acercado con la intención de solicitar ayuda para estudios u otras cosas. Cuando vaya a San Clemente tengo que hablar con un par de fraternos que colaboran con discapacitados y quieren hacer un proyecto. Las iniciativas brotan y eso es una alegría ya que la actividad y el movimiento no cesan. Hoy almorcé sola ya que había quedado a la 13.00 con Vicky en la biblioteca para ir a hacer unas compras en el centro: material escolar (papelería) y material higiénico (botiquin).




En el centro nos encontramos con Diego y los tres fuimos a distintas tiendas, mirando precios.. hasta que poco a poco fuimos comprando algunas cosas que necesitaba la biblioteca. Por el centro esta vez hemos podido ser testigos de la gran presencia de prostitutas que hay por las calles, en cualquier zona. Unas son más reconocibles y otras no tanto. Muchas de ellas, son verdaderas niñas con una mirada que lo dice todo sin decir nada. Hoy ha habido una imagen que me ha impresionado mucho y es que mientras estábamos en una farmacia comprando material higiénico, ha venido un niño, no mayor de 7 años, descalzo pero con pies hinchados y de color de "infección", muy suicio y con a penas un pantalón corto y una camiseta (todo muy sucio y viejo). Ya le habíamos visto por otra calle. Este niño, reflejaba en su mirada la soledad, la enfermedad, la dureza de una vida en la calle y la desconfianza hacia todos. Se tumbó en el suelo de la farmacía y metía mano y brazo en los bajos del mostrador buscando alguna cosa para comer, entre un montón de maraña de polvo que sacaba. Por su propia dignidad, no me atreví a sacarle foto, pero dudo que se me borre su imagen. Era pequeño... pero tan grande a la vez. Por mucho que intenté imaginarme los motivos por los que está así, no pude alcanzar a razonar que un estado, un gobierno pueda permitir que niños tan pequeños estén en esas condiciones. Se ve a mucho niño trabajando, recicladero por las basuras, trasportando carros de frutas (de madera) por la carretera, limpiando botas, pidiendo por las calles, pero es que este pelao..... superaba todo lo visto hasta el momento y la indiferencia de la gente también superaba lo visto.
Cuando terminamos de comprar ya no estaba por la calle.... sus pies descalzos, infectados... qué caminos habría recorrido?? cuál era el trayecto de su vida??? Señor hoy quiero pedirte por todos los niños del mundo, en especial por los más olvidados, abandonados, abusados, abortados, maltratados, desnutridos, enfermos, en soledad y en silencio... por esos niños que tienen esperanza, que no sueñan con ser nada de mayor pues están convencidos que no llegarán a mayor (por la violencia), por los que tienen que trabajar a la fuerza (aquí hay una cantera de piedra y hay adultos pero también se ven niños), por los que son prostituidos, por los que desconocen qué es una caricia, una ternura, un abrazo. Por tanto niño sin lágrimas, por tantas lágrimas en los niños, por las voces calladas, por los niños encerrados en sus casas, por los niños que cuidan de otros niños, por los niños pequeños víctimas de abuso de sus padrastros, hermanos... por todo aquellos que tienen que dejar la escuela, por los niños desplazados víctimas de la violencia y testigos de desgarradoras imágenes, por los niños que muerden el polvo en busca de migas sobrantes de los demás, por los niños desesperados que acaban en muertes tempranas, por aquellos que sólo quieren ser niños y no pueden... que encuentren en ti la paz y la fortaleza para seguir su camino con la dignidad que toda persona merece.



Tras el paseo por el centro subimos a la biblioteca, se hizo un poco de limpieza, se colocaron los materiales comprados y luego fuimos, junto con Mónica (becada universitaria y colaboradora) por las casas de la zona, recogiendo las colaboraciones para este domingo que celebran el día del niño, y se realiza un sancocho (comida típica) para todo el barrio (1º niños). Se iba tocando puerta por puerta y la gente, al ya conocer la biblioteca y su labor, daba lo que podía: banano, piña, papa... Mientras recorríamos el barrio, ya de noche se podía ver a todos los niños en la calle, jugando y enseguida pedían que se les sacase fotos..... qué felicidad, parecían auténticos modelos. Como podéis ver, hay varios descalzos por las calles, jugando con las chapas de cerveza o con una rueda... es un barrio muy humilde y la colaboración de la gente es lenta pero se sigue sensibilizando. La música salía a todo volumen de las casas, y es que se nota que es viernes porque hay gente tomando cervezas y ambiente más festivo. A las 20.00 llegué a casa y el día se pasó rápido. El domingo por la mañana me voy a San Clemente (5 horas), allí se lleva meses sin línea telefónica; sólo se comunican mediante celular (telf móvil). Iré en autobús con un junior que se ha ofrecido a acompañarme y de paso lleva un material. El jueves o viernes tendré que viajar a Bogotá (toda una noche se tarda), así que aprovecharé al máximo el tiempo allí, en tierra caliente.

1 comentario:

Anónimo dijo...

El tema de la noticia queda a un lado al leer la "oración" de los niños, gracias por acercarnos a la dura realidad que vas viviendo día a día y que desde aquí parece un tanto imposible. No tengo palabras para darte ánimos, porque soy yo la que en estos momentos los necesito, por qué yo soy de aquí? qué hice yo para disfrutar de esta vida? ppor qué no estoy yo en la piel de ese pequeño-viejo recogiendo lo que puedo del suelo? por qué no trabajo en la cantera, popr qué... gracias te doy Señor con remordimiento, y hazme utensilio Tuyo para trabajar por la igualdad. beos y abrazos compartidos maribi